Este concepto de alimentación se basa principalmente en consumir alimentos crudos. Su objetivo es conservar totalmente las propiedades naturales de los nutrientes de los alimentos (principalmente las enzimas y las vitaminas), que mediante la cocina convencional suelen perderse o reducirse (el calor por encima de los 43º deteriora las cualidades de los alimentos). Así, los alimentos cocidos o calentados no se contemplan en esta dieta.
En el estado de California, este concepto de alimentación tiene mucho éxito. Las personas que llevan a cabo esta dieta aseguran que los alimentos preparados y procesados no son adecuados para el organismo, ya que pueden causar excitotoxicidad (proceso que provoca la muerte de las neuronas).
En esta dieta, que es más una filosofía de vida que una manera de alimentarse, también quedan excluidos los estimulantes como el alcohol, el tabaco o el café. Quizá te suene a un tipo de alimentación o estilo de vida similar al vegano pero no confundas términos, los veganos no consumen nada de origen animal. En estas dietas sí, aunque un vegano también puede seguir una dieta raw food, discriminando los mismo alimentos que en una dieta normal vegana.
Ventajas de la dieta raw
Si decides adoptar este tipo de dieta encontrarás algunas ventajas, sobre todo respecto a las propiedades de los alimentos:
-Las frutas y las verduras crudas conservan muchos más nutrientes (vitaminas, minerales, etc.) que al ser cocinados de cualquiera de las formas.
-Aquellos que siguen esta dieta, aseguran que aumenta la energía y favorece la digestión.
-Notarás cambios incluso relacionados con tu belleza, mejora notablemente el aspecto de la piel.
-Es cierto que perderás peso ya que, para empezar, no consumirás fritos ni alimentos precocinados. Además, este tipo de alimentación reduce el riesgo de sufrir problemas cardíacos, enfermedades como el cáncer o la diabetes y reduce el colesterol y los triglicéridos.
Desventajas de la dieta raw
Este tipo de dieta entra en el grupo de las dietas restrictivas, dado que habrá alimentos que no consumas por su forma de cocción. En todos estos tipos de dietas, pueden aparecer dolores de cabeza, mareos y náuseas a causa de la desintoxicación a la que está siendo sometido el organismo.
Si vas a empezar a seguir este tipo de alimentación, te recomendamos que lo hagas poco a poco porque si no, notarás grandísimos cambios y debilidad. Además, puedes sufrir carencias nutricionales de hierro, calcio, proteínas o vitamina B12.
Para seguir este tipo de dieta, deberás complementar tu alimentación con ingredientes ricos en vitamina B y calcio, por ejemplo. Las mujeres embarazadas o los niños no deben seguir este tipo de dieta, igualmente que tampoco deberán hacerlo las personas con anemia o riesgo de padecerla.